sábado, 7 de marzo de 2009

30 de JUNIO


30
Junio



de 1520. En Teocalhueyacan los aztecas han recuperado su ciudad. Las azoteas se erizaron de arcos y lanzas y la laguna se cubrió de canoas en pelea. Los conquistadores y Hernán Cortés huyeron en desbandada, perseguidos por una tempestad de flechas y piedras, mientras aturdían la noche los tambores de la guerra, los alaridos y las maldiciones. Se conoce como “La noche triste”, yo diría un día de la victoria de los originarios.


Y Magdalena vendrá
bajando del cerro hacia el mar
.



Magdalena había sido seducida
y abandonada por Pedro
que era el dueño de su aldea llamada La Vega.
Ella leyó el aviso publicado por Bartolomé
que le ofrecía vender su cuerpo
a trece mil kilómetros de su isla La Española
en la tierra fundada por Juan
con sus veinte abriles frescos, llego a la París del Sud
la recibió Simón que la vendió a Jacobo
era la novedad, alta, bonita, blanca y caribeña
vino Andrés que le prometió el oro y el moro
y la perdió en una apuesta con Marcos
que la puso a recorrer el callejón oscuro
donde Santiago la secuestró
y la maltrataba por traer pocos morlacos
En el remate de carne viva la obtuvo Felipe
que la llevó a la mina
donde se sirvieron de ella
seiscientos sesenta y seis topos.
Tadeo la recogió del sucio Gabón
donde su hijo Tomas la explotaba
y la rifo con los pupilos de Mateo
la vendieron a Judas por treinta monedas,
con él la cama caliente era eterna,
sin descanso, sin protección y la contagió
Matías la abandonó en la guardia del hospital
y hoy Jesús la cuida en la sala 17 del Muñiz

No hay comentarios:

Publicar un comentario